(La siguiente entrada NO tiene como objetivo inspirarte a leer o mirar ninguna de las obras que aquí se plantean)
(Alerta spoilers por todos lados)
Siento un genuino interés por rescatar lo mejor de cada una de estas obras de arte y en caso de que sea necesario, resaltar algún punto que, bajo mi percepción, le reste valor al resultado final.
En estas observaciones quiero hablar primero de la película y luego de los libros por dos razones. Primero, porque este fue el orden en el cual me topé con la historia de esta franquicia. Segundo, porque considero desde el principio, que los libros son mucho mas enriquecedores de absolutamente todos los temas que se manejan en las películas. Salvo dos o tres excepciones. Comienzo.
La primera característica que rescato de esta película es la estética. Salvo la siguiente entrega, esta es la única película que se ve tan limpia y tenue a la vez. Es todo tan brillante. No un brillo incandescente, sino como el brillo de una pintura sobre el oleo. Tan antigua y tan actual, todo esto no solo en las escenas que se llevan a cabo en el mundo mágico; el mundo muggle también posee una tónica similar, distinta, pero dentro de la estética. Eso es maravilloso.
La influencia del director Chris Columbus dice presente en esta y en la segunda entrega, lo cual agradezco mucho porque se generan muchos detalles que luego se pierden en las películas posteriores y termina siendo una lástima. Un ejemplo de ello son los uniformes, una belleza que nos roban a partir de la tercera entrega y en lo personal creo que le restan cierta identidad que venía proponiendo la franquicia en sus inicios.
Cuando disfruté esta película por primera vez, recuerdo que habían dos momentos que me hacían sonreír de la emoción.
El primero sería la visita al callejón diágon. Que aventura amigos. Además que la música acompaña todo tan armónicamente que para este momento ya te sientes incluido. Tanto así que aun siendo mayor, conecto con la emoción de Harry al ver este increíble lugar por primera vez. Es fascinante. El momento de escoger la varita (o ser escogido mejor dicho) es mágico en todo el sentido de la palabra. Me alegra tanto que esta escena haya sido tratada con tanto simbolismo iniciando la saga. Luego sabremos que es sumamente importante para el desarrollo de todos los hechos, pero cuando la película estaba siendo filmada, esto no se tenía en cuenta, lo cual, en retrospectiva, le agrega mucho valor.
El segundo momento sin dudas es el partido de Quidditch. Imagínate a un chico de once años mirando esto. Es una sensación de euforia y alegría cuando comienza el partido y están todos los jugadores rebasándose y golpeándose a tan altas velocidades. Hay que verlo varias veces para fijarse en todos los detalles maravillosos que se crearon con estas escenas. El momento final, cuando Harry captura la snitch con la boca es utilizado por la autora en el futuro de una forma tan creativa que obviamente me lo voy a guardar para después, pero, al igual que lo mencionado en el párrafo anterior, estos momentos adquieren gran valor narrativo y emocional cuando se miran en retrospectiva junto al resto de la historia.
Otro de los momentos que me gusta bastante de la película es el ajedrez mágico gigante, pero en comparación con lo demás me parece menos relevante.
Creo que lo más rescatable de esta película es que cumple muy bien con la misión de introducir, enseñarnos, plantearnos como son las cosas y sobretodo que nos parezca atractivo, visual, auditiva y narrativamente. Claro que entre todas no es la trama más profunda e interesante, pero son las aventuras de Harry, Ron y Hermione en un nuevo mundo y nosotros vamos con ellos tomados de la mano.
Muy bien, teniendo en cuenta que los libros profundizan mucho más en todos los aspectos del mundo y de la historia, no lo tomaré como un punto a favor sino como un defecto necesario para las películas pues, al realizar la adaptación hay cambios que son necesarios. Pero hay otros que reprocharé el resto de mis días. ¿Qué les costaba incluir a Peeves al menos veinte segundos?. Bueno. Lamento eso.
Leí que al inicio de la franquicia una de las críticas que recibió la autora fue que la trama era muy infantil pero nunca comprendí el problema con eso. Debo decir que con cada libro me sentía muy influenciado por el lenguaje que se maneja; entonces, a mí me ha fascinado sentirme como un niño mientras leía una trama que aparenta ser infantil, (pues se trata de un huérfano al cual lo maltratan sus familiares adoptivos porque a sus padres los asesinaron. Claro.) sin embargo, esta tónica infantil e inocente que tiene la historia en sus primeros pasos me parece muy atractiva, de hecho, se entremezcla muy bien con la trama, como en estos momentos de suspicacia con Snape y los deseos de culparlo porque sí. Todo es muy infantil pero es parte necesaria de la esencia de esta historia en general.
Hay unos cuantos momentos de esta obra que me marcaron muchísimo.
No podía creerle a mi cuerpo lo que me estaba haciendo en el capítulo en que Harry y Ron se conocen en el tren. Lloraba, lloraba de emoción leyendo. Tal vez el hecho de conocer TODA la historia antes de leer el libro influya en eso (muy probable) pero no le quita méritos. Esto es una amistad pura. Una amistad limpia, sin prejuicios. El cruce de lo magnifico que es Harry por su pasado y lo "simple" que es Ron por ser un Weesley. La vida de muggle y la vida mágica. Es sin dudas uno de mis momentos favoritos de todos los libros. Hermoso. En la película, por otro lado, es uno de esos momentos que tienen pinta de transitorios; tal vez necesario en esta oportunidad, pero el contraste con la sensación del libro es demasiado grande.
Otro de los momentos es al final cuando se decide la casa ganadora de la copa. Lloraba cuando gracias al coraje de Neville lograron ganar por diez puntos. Es que lo recuerdo y se me eriza la piel. La autora nos vende a Neville siempre como el desafortunado y al final resulta que, sin desearlo y sin planearlo en lo absoluto, es el héroe. Y esto lo hace en este libro, pero lo ha estado haciendo desde el inicio hasta el final. Esta es la clase de personajes que llegan profundo dentro de mí. Los que son como son y por eso son grandes. Enserio que este momento es una joya preciosa, incluso en la película se logró rescatar la misión del sentimiento. Me fascina.
Uno de los grandes momentos sería finalmente, la reunión de Dumbledore y Harry en la enfermería. (En este momento estamos iniciando pero es posible que en un futuro haga una entrada completa para describir porqué creo que la esencia de toda esta historia, a través de los siete libros, se encuentra en las reuniones finales entre Harry y Dumbledore. Por supuesto esta es una postura muy personal.) En este libro se da la primera de ellas y la cantidad de información que obtenemos es abrumadora comparada con lo que ocurre en la película. Este tema me parece muy delicado porque es acá donde obtenemos las respuestas a muchas de las incógnitas que se dan durante la trama de este primer libro. En cambio en la película nos encontramos con una escena mas o menos transitoria y un Dumbledore que luce un poco distante en mi opinión. (Tomando en cuenta que en las películas me quedo con el segundo intérprete. Luego hablaremos de ello) Por otro lado, en el libro se interpreta como el maestro por excelencia, el director de la mejor institución de magia y hechicería se agacha para mirar a los ojos a un pequeño y talentoso estudiante que necesita un primer sermón para que no pierda el foco hacia su magnífico destino. Vemos, de reojo, los primeros pincelazos de sabiduría de este GRAN personaje.
Me quedo con las palabras de Dumbledore acerca de la muerte de Nicolas Flamel, su gran amigo.
"Tranquilo Harry, para la mente preparada, la muerte no es más que la siguiente aventura". Una delicia literaria, auditiva, filosófica y todo lo que queramos acá en HdA o en cualquier parte del mundo.
Lo que más me queda de este libro es esa sensación de inicio, que la película logra rescatar muy bien, para introducirnos en este fantástico, curioso y entretenido mundo llamado Harry Potter. Probablemente al momento de iniciar con la lectura de todos ellos, este libro sea o el que lees mas rápido o el que tardas más en leer. Esto porque es el libro más corto pero el que carece de más profundidad. Por ahora no decimos nada sobre el antagonista por excelencia de la historia porque sería ideal darle el espacio que se merece cuando comienza a tomar más protagonismo dentro de la trama global.
Muchas gracias por leer. Ahora, hablando enserio, ¿Qué pasó con Peeves?